El ácido fólico también conocido como vitamina B9, es un nutriente crucial para un crecimiento y desarrollo saludable en los niños y niñas.
Por ello, es importante entender la magnitud que tiene en nuestro organismo y cómo puede beneficiarnos obtenerlo.
Juega un papel fundamental en numerosas funciones biológicas y metabólicas que ocurren en el organismo, entre las más importantes tenemos:
Prevención de defectos congénitos
Juega un papel fundamental en la prevención de defectos del tubo neural como la espina bífida en fetos de mujeres embarazadas y después de nacer sus niveles adecuados favorecen un desarrollo neurológico saludable previniendo problemas cognitivos.
Desarrollo y crecimiento celular
El ácido fólico es fundamental para la síntesis de ADN y la división celular, durante la infancia el cuerpo experimenta un crecimiento rápido y requiere gran cantidad de células nuevas.
Este nutriente garantiza que las células se dividan y crezcan adecuadamente, lo que es esencial para el desarrollo de órganos y tejidos.
Fortalece el sistema inmunológico
El ácido fólico ayuda al cuerpo a combatir enfermedades e infecciones, un adecuado suministro de esta vitamina es esencial para mantener una respuesta inmune fuerte y efectiva.
Producción de glóbulos rojos
El ácido fólico desempeña un papel crucial en la producción de estas células, su déficit puede ocasionar anemia megaloblástica, una condición donde los glóbulos rojos son anormalmente grandes y no funcionan correctamente.
Desempeño cognitivo y desarrollo neurológico
Diversos estudios han mostrado que el ácido fólico tiene un impacto positivo en el desarrollo cognitivo y neurológico de los niños.
Niveles adecuados se asocian en mejores resultados en pruebas de habilidades mentales, mejor memoria y mejor capacidad de aprendizaje, ya que juega un papel importante en la formación de neurotransmisores y el mantenimiento de la salud de las células nerviosas.
¿Cuáles son las fuentes naturales de ácido fólico?
Para garantizar que los niños tengan niveles adecuados de ácido fólico es necesario incluir en su dieta fuentes de dicha vitamina, entre ellos tenemos:
• Verduras de hojas verdes: espinaca, acelga, brócoli
• Frutas: naranja, banano y melón
• Leguminosas: lentejas, fríjoles, arvejas.
• Cereales fortificados y productos de grano entero.
Asegurar que los niños reciban suficiente ácido fólico a través de una dieta equilibrada, puede tener un impacto significativo en su bienestar presente y futuro.
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